Villamuriel de Cerrato es un municipio situado en la provincia de Palencia, a escasos kilómetros de la capital con una superficie total de 40km2.
Si hablamos de la historia del municipio debemos presuponer, tras comprobar la existencia de algunos yacimientos arqueológicos, que existieron asentamientos desde al Edad de Bronce o incluso Vacceas, debido también a la proximidad con poblaciones donde estas están constatadas. Los primeros pobladores estables de los que se tiene constantancia son de época romana. Junto al actual convento de la Consolación de Calabazanos, se han encontrado restos datados de entre los siglos II y IV d.C.
No será hasta la Edad Media cuando Villamuriel de Cerrato consolide una población, esto sucederá con la conquista y repoblación de las zonas al norte del Duero por Alfonso III de Asturias. Será Alfonso VII de León quien done el lugar en 1141 al obispo de Palencia, convirtiéndose así Villamuriel en señorío episcopal. Desde entonces los prelados palentinos quedarán ligados al municipio, construyendo en él la actual iglesia de Santa María la Mayor, proyectada e iniciada por el obispo Arderico en el siglo XII y continuada por el obispo Tello Téllez de Meneses (s. XIII).
Se convierte así el templo en un lugar de retiro. Se añade anexo a la nave un palacio-fortaleza que sirviera de refugio y lugar de descanso para los pontífices palentinos. Algunos de estos, ante la comodidad del palacio, nunca llegaron a instalarse en la sede de la capital, dándose la particularidad de que todos los obispos de Palencia deberían pasar al menos una noche por el palacio de Villamuriel antes de tomar posesión de su cargo en la capital, para salir desde aquí a lomos de una mula blanca, para ser recibidos por las autoridades palentinas en el portazgo de la ciudad.
La dilatada historia de Villamuriel, ha estado ligada estrechamente al devenir y consolidación de Santa María la Mayor, a ella acudieron personajes tan destacados de la realeza castellana como María de Molina o el infante don Juan, refugiado en Villamuriel tras ser amenazado de muerte por Fernando VI.
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El año 1520, es otra fecha señalada, pues se produce una contienda dentro de la conocida como la Guerra de las Comunidades. El 14 de septiembre, los comuneros de Palencia, acudieron a Villamuriel para quemar parte de la fortaleza y derribar parte de la torre de Santa María ante el abandono a la que la sometía el obispo. En 1524 se reformará la torre y parte del palacio tras el perdón de a los comuneros que atacaron a la sede de Villamuriel. El palacio episcopal y las dependencias se irán perdiendo progresivamente y de manera definitiva con la Desamortización.
Otro hecho reseñable en la historia de Villamuriel, y dando un salto temporal, nos lo encontramos con la llegada del Canal de Castilla y su construcción. El Canal de Castilla comienza su construcción en el siglo XVIII para facilitar el transporte por una vía fluvial que se construirá a tal efecto, aunque en el proyecto original este canal tendría cuatro ramales, pero la complejidad del proyecto lo dejo en tres, siendo el ramal sur el que pasa por el municipio con las Esclusas 33, situadas en el Casco Viejo y las 34, 35 y 36, situadas en el Soto Alburez, presentando una peculiaridad: tras el estallido de la Guerra de la Independencia, las obras quedan paralizadas en este punto y a su reanudación las esclusas pasan de ser ovaladas a rectangulares.
La Guerra de la Independencia también tuvo su reflejo en la Villa y su Iglesia. Las tropas de Lord Wellintong se enfrentaron a las francesas el 25 de octubre de 1812, tras la retirada de Burgos, en Villamuriel causando daños en la Iglesia, especialmente en la escalera del atrio y en el puente sobre el rio Carrión.
1978, es otra de las fechas marcadas en el calendario de la historia villamurielense, en octubre de ese mismo año se instala en Villamuriel la factoría automovilística Renault, suponiendo el mayor cambio estructural y demográfico del municipio, pasando de ser en 10 años un municipio agrícola con una población aproximada de 1.300 habitantes a una industrial de más de 4.000. Este cambio supone la aparición de nuevos núcleos de población, los barrios de Ciudad Jardín Virgen del Milagro, los Olmillos y Calabazanos, el único ya existente antes de 1978.
Ligado a la historia de Villamuriel de Cerrato, esta Calabazanos, población de la que se tiene constancia desde el siglo XII, con ese mismo nombre, aunque como se ha señalado es en este lugar donde se encuentran los restos del asentamiento romano. Su evolución viene marcada por la casa fuerte del dicho siglo y el posterior convento fundado por doña Leonor de Castilla en 1458, viuda de don Pedro Manrique, adelantado mayor de Castilla, y madre del poeta Gómez Manrique, autor del Auto de Nacimiento de Nuestro Señor, primera obra de teatro en castellano de autor conocido a cuya primera representación acudió Isabel la Católica, por aquel entonces infanta.
